sábado, 25 de febrero de 2012

The Help



The Help (llamada por aquí con el insulso nombre de Historias Cruzadas) tiene el papel que hace un par de años tuvo esa pelicula con la antipática Sandra Bullock llamada The Blind Side; ser esa pelicula moralista que le dice al resto del mundo "Hey, nosotros eramos racistas, ¡pero ya no!" que Hollywood tanto necesita. Y si bien con esta introducción podría dar a entender que estamos ante una pelicula mala o algo parecido, están lejos de la realidad, pero sin duda esta es la pelicula con más fallas de las nominadas que he visto hasta ahora, aunque tiene logros que también voy a resaltar.

En la cinta conocemos a Skeeter (interpretada por la guapa y talentosa Emma Stone) una joven idealista con ambiciones de escritora que ha crecido en un circulo abiertamente racista y superficial en los años 50's de Estados Unidos. Ella, que no es una calabaza destinada a ser ama de casa y procrear hijos como conejos como la mayoría de sus vecinas, tiene el sueño de escribir un libro donde plasme el punto de vista de las empleadas negras de su ciudad, lo bueno y lo malo, para apoyarlas contra el fuerte odio racial que habia en esa época. Hasta ahí, vamos bien.

El gran problema de The Help es su trabajo de personajes. Me explico: el director Tate Taylor cae en el clásico error de las películas de acción (aunque estamos ante un drama lacrimógeno, la comparación es valida) de simplificar tanto a los "villanos", en este caso a las amigas racistas de la personaje (destacando a Bryce Dallas Howard), convirtiéndolas a todas en un estereotipo sin personalidad, exageradas y poco creíbles.  Cumplen, de hecho, con su misión de caer mal, pero cayendo al cliché y a lo plano de sus personajes. Emma Stone, pone el balance entre esos personajes, junto a Jessica Chastain, con un papel un poquito pasado de tuerca, pero con diferentes matices que se agradecen. 

En el otro extremo, el positivo, están las actrices que interpretan el papel de las "victimas". Las empleadas negras que sufren los maltratos a lo largo de la película, si bien también caen en el estereotipo de la nobleza y desprendimiento, tienen capas y variantes que hacen de sus personajes más interesantes y emocionalmente vinculables con el espectador. Siendo sincero,son las actuaciones de Viola Davis y Octavia Spencer lo mejor del film, y son totalmente justas sus nominaciones al Oscar para Actriz Principal y Secundaria, respectivamente. 

La historia, en si, es triste. Por eso la calificaría, más allá de decir que es buena, como emotiva. Hay, efectivamente, escenas que harán llorar a los corazones sensibles (sin soltar muchos spoilers, la escena final con la niña llorando en la ventana esta muy bien hecha), como escenas que ponen la piel de gallina por la crudeza del racismo y las distancias sociales que se ponían en esos años ( la escena de los policias arrestando a una empleada negra y golpeándola, por ejemplo), y por eso cumple su objetivo de, como dije párrafos arriba, ser una cinta para llorar, como le gustan a la Academia (y a los espectadores, no voy a ser tan hipócrita). Agradezco ENORMEMENTE que el final no haya sido tan feliz, porque hubiese sido totalmente una copia del típico esquema de las novelas mexicanas. Que te dejen con la idea de que no todo puede, como en la vida real, salir bien, es un elemento que en mi punto de vista se aprecia bastante.

The Help no es película mala. The Help es, a lo mucho, una película tierna que se pudo haber hecho mejor. 








jueves, 23 de febrero de 2012

The Artist



Probablemente esta es la pelicula que se llevará el Oscar el domingo, todo indica eso.

Y tiene los méritos. The Artist es una película arriesgada (muda y en blanco/negro, me recuerda a lo que iba a ser The Mist de Frank Darabont), con un soundtrack precioso y una ambientación sorprendente... pero no me parece lo mejor del año. Por lo menos en comparación con las otras películas en competencia que he visto, ya que considero a Midnight in Paris de Woody Allen superior.

En el film vemos a George Valentin (un increiblemente carismático Jean Dujardin) actor estrella de las peliculas mudas en 1927, que vive la transición al cine sonoro, donde su terquedad y orgullo lo hacen resistirse a dar el paso al futuro. En el otro extremo, Peppy Miller (la argentina Berenice Bejo) es el rostro del nuevo periodo del cine. 

Por motivos obvio, la película no sera del disfrute de aquellos acostumbrados al blockbuster. En la sala donde la vi hoy habían varios al borde del sueño, situación totalmente injusta, pero lamentable comprensible. El humor de la cinta es una replica al del cine mudo; sano y limpio. Los escenas de tensión sin música de acompañamiento por momentos podrían hacerse largas para este tipo de publico que ha encontrado en, por ejemplo Los Pitufos, una joya del séptimo arte. 

Linda canción que acompaña una escena de la película.


El elenco, como remarqué allí arriba, esta increíblemente elegido, dándoles a dos desconocidos del mainstream la oportunidad de brillar con papeles que hacen totalmente suyos. En el reparto estan John Goodman y al genial secundario James Cromwell (que recordarán de películas como La Suma de Todos los Miedos, Yo Robot, Spiderman 3, por citar las más comerciales) que hace de un simpático y fiel mayordomo.

Michel Hazanavicius, el director, se merece un aplauso por el coraje de ir contracorriente, y hacerlo salir airoso. Se merece, me corrijo, varios aplausos por hacer un tributo a la historia del cine (la historia de Valetin tiene bastantes lugares en común con la de Chaplin) pero yo no le daría el Oscar, por lo menos no este año. 






lunes, 20 de febrero de 2012

Midnight in Paris


Midnight in Paris ★★★★

NOTA ¿IMPORTANTE?: La pelicula se estreno el año pasado y la están reestrenando en algunos cines por su nominación al Oscar, por si hay algún interesando.

Midnight in París, trabajo del siempre genial Woody Allen, es en palabras simples y concisas, romántica y nostálgica. Es una historia de amor, no entre personas, si no hacia una ciudad, lo cual no es nuevo en Allen. Los primeros 2 o 3 minutos son tomas sueltas de París, ajenas a la trama aparentemente, pero son hermosas postales de lo que veremos a lo largo del film.

En Midnight in Paris, Gil (interpretado por un Owen Wilson en un papel decente después de mucho tiempo) es un escritor que termina en París con su antipática novia  donde intenta encontrarse a si mismo, en una ciudad que adora, como escenario de tantos personajes que admira, y como lugar donde se siente como en casa.

Allí, cada medianoche, termina en una paradoja temporal, donde conocerá a personajes como Ernest Hermingway, Scott Fitzgerald, Salvador Dali (un excelente y divertidisimo cameo de Adrien Brody, hablando de amor y rinocerontes) y a Adriana, amante de una infinidad de artistas de la época  y que finalmente también enamorada al pobre Gil; y como no, siendo interpretado por la preciosa Marion Cotillard. Quiero resaltar también los papeles de Kathy Bates, Michael Sheen, Carla Bruni y Allison Pill, precisos en sus pequeños papeles.

Woody Allen firma un guión donde la idea principal del film choca consigo misma, pero no de forma que dañe a la pelicula. El hecho de lo negativo y lo positivo de vivir en el pasado,  satanizando el presente. Donde los personajes, todos a su manera, solo quieren vivir. Desde Gil que quiere escribir e inspirarse en otro tiempo, o la novia que que prefiere la superficialidad de la ciudad, hasta los escritores y pintores que van a apareciendo, viviendo loca y apasionadamente en un contexto tan atemporal como su propio arte. 

Bonita en contexto, y arruino a propósito la escena final, que creo que enmarca de forma hermosa todo lo que es la película: Owen Wilson, dispuesto a comenzar de cero, solo en Paris, encuentra a Gabrielle (Lea Seydoux), una joven que vendía discos de Cole Porter y con quien hace química en cierto momento del film. Empieza a llover, y juntos, con esa magia que tienen dos personas que recién empiezan a conocerse, caminan y se pierden de la cámara. Así de simple y así de bonito. 



martes, 7 de febrero de 2012

Moneyball



Mi conocimiento del béisbol es tan limitado, rozando la ignorancia, que los primeros 5 minutos de Moneyball, película que nos cuenta las desventuras de un equipo de béisbol que viene saliendo de una crisis y las maniobras de su gerente para sacarlos adelante, se me hicieron insoportablemente aburridos. Densos, lentos, exageradamente para fanáticos. Y el resto de la pelicula gira a ese ritmo, lo que podría sonar mal, muy mal, de no ser por un par de detalles.

Si bien la estructura del guion es básica y sigue el molde de las clásicas películas deportivas (equipo que va mal, luego peor y luego va mejorando gradualmente), su brillo esta en los diálogos: filudos, rápidos, precisos. Se nota la mano de Aaron Sorkin, que también escribió Red Social, la mejor película del año pasado, precisamente también por eso, el guion. Obviamente, el desenlace es, dentro de lo esperado, predecible.

Pero sin duda su mayor acierto es el elenco. Un Brad Pitt soberbio, que lleva el peso del film las dos horas de duración. Merecidisima su nominación, para un actor que lleva años demostrando la gran madera que tiene, y que no es solo una cara bonita (desde el Fight Club,que gran pelicula). Bien respaldado esta, en un breve Philliph Seymour Hoffman, con quien tiene varios choques en la pelicula, siendo ambos dos grandes del cine norteamericano moderno. Jonah Hill, que esta nominado a actor secundario por su primer papel serio (lo deben recordar por ser Seth en Superbad) cumple bastante bien, pero todavía me cuesta asimilar su nominación. Resalto, en negritas y todo, a Kerris Dorsen, que interpreta a la hija del personaje de Brad Pitt, tiene una escena realmente linda junto a él, en una tienda de guitarras, interpretando una canción; que de verdad me parece el momento más sentimental del film y el mejor logrado, a pesar de estar tan alejado de la trama principal.

El director Bennet Miller, que antes dirigio la interesante Capote, desarrolla en Moneyball su historia de manera acertada, basándose en las transiciones emocionales del personaje de Pitt (las escenas de Pitt viajando en el auto, por ejemplo) y dándose el privilegio de no ampliar o indagar en los otros secundarios, creando atmósferas tensas con la iluminación y el buen uso de los interiores. 

En resumen, Moneyball es una película interesante, con una historia muy típica y que con otro elenco, seria una más del montón.